El Cutty Sark, construido en Dumbarton, es el más conocido de todos los clippers y en su apogeo fue el más rápido de todos. Podía transportar 32000 pies cuadrados de vela, lo que le daba una velocidad máxima de más de 17 nudos. Empleada en el comercio del té, estaba acostumbrada a acelerar la cosecha de la nueva temporada desde China a Londres, donde los equipos esperaban ganar el prestigio de ser los primeros en regresar.
 
 Desde 1957 ha estado en el dique seco de Greenwich, Londres, atrayendo visitantes de todo el mundo. Este barco tan querido casi fue destruido en un gran incendio el 21 de mayo de 2007. El barco reabrió al público en abril de 2012 después de una restauración de £ 50 millones.